¿Señal de alerta?: China enfrió la compra de carne y lo sintieron los exportadores de Argentina y Brasil
Según Rosgan, un retroceso inesperado en los embarques de noviembre encendió alertas. La fuerte concentración de ventas en China, en un contexto de altos costos internos, expone aspectos a mejorar.
Las exportaciones de carne vacuna argentinas registraron en noviembre una caída poco habitual para la época del año, tradicionalmente marcada por una mayor demanda de China.
Según el último informe del Rosgan, con datos oficiales del INDEC, los embarques totalizaron 64.477 toneladas peso producto, lo que representó una baja del 5,4% respecto de octubre, junto con una reducción del 2,7% en el valor promedio exportado.
El dato más relevante del mes es que más del 90% del volumen perdido se explica por una menor demanda de China.
En noviembre, los envíos al Gigante Asiático sumaron 46.180 toneladas, lo que implicó una caída de más de 3.400 toneladas frente al mes previo (-9,3%) y de unas 7.500 toneladas en comparación con igual mes de 2024 (-14%).
A esta retracción se sumó, además, una leve baja en los precios.
“Los datos preliminares de diciembre, elaborados a partir del ritmo de certificaciones del SENASA, anticipan que la tendencia continuaría, con volúmenes más de un 10% inferiores a los del mismo mes del año pasado”, señala el último informe del Mercado Ganadero de la BCR.
UN FRENO REGIONAL CON IMPACTO DESIGUAL
Al observar lo ocurrido en otros países exportadores de la región, el freno de las compras chinas no parece exclusivo de Argentina. Brasil, principal proveedor de carne vacuna a China, también redujo sus envíos en noviembre cerca de un 15%, pasando de 42.550 toneladas en octubre a 36.070 toneladas.
En este contexto, el informe del Rosgan interpreta que los importadores chinos atraviesan un compás de espera previo a la resolución de la investigación por salvaguardia sobre las importaciones, prevista para el próximo 26 de enero.
Sin embargo, el impacto es mayor para Argentina debido a su elevada concentración de ventas en ese destino: en noviembre, China explicó el 72% de las exportaciones argentinas, frente al 52% en el caso brasileño.
COSTOS INTERNOS Y UN MERCADO DE VOLUMEN
Otro factor que condiciona el negocio exportador es el fuerte aumento del precio de la hacienda en el mercado local. El valor del novillo, medido por el índice INMAG, subió un 92% interanual en pesos corrientes, muy por encima del 24% registrado por el índice de precios mayoristas.
Esta suba, favorable para el productor, encarece significativamente la materia prima y complica la operatoria tanto de frigoríficos exportadores como de abastecedores del mercado interno.
En el caso de China, además, Argentina coloca mayoritariamente cortes congelados de bajo valor comercial. Se trata de un mercado de volumen más que de precios, lo que reduce su atractivo en un escenario de altos costos y márgenes ajustados.
LA NECESIDAD DE DIVERSIFICAR DESTINOS
Frente a este panorama, el Rosgan subraya la importancia estratégica de consolidar y ampliar las exportaciones hacia mercados que, además de volumen, ofrecen un mayor valor por tonelada. Estados Unidos y la Unión Europea aparecen como destinos clave en ese sentido.
Los números lo reflejan con claridad: mientras que los cortes enviados a China promedian valores cercanos a los USD 5.000 por tonelada FOB, Estados Unidos paga en torno a los USD 9.100 por tonelada, y Europa —especialmente bajo cuota Hilton— supera los USD 18.000.
MÁS INGRESOS CON MENOS VOLUMEN
En los primeros once meses del año, Argentina exportó 655.000 toneladas peso producto de carne vacuna. De ese total, el 70% tuvo como destino China, con un valor promedio de USD 3.800 por tonelada. Estados Unidos absorbió cerca del 6% de los embarques, a un promedio de USD 7.570, mientras que la Unión Europea concentró alrededor del 9%, con valores medios de USD 12.240 por tonelada.
Gracias a esta combinación de mercados, las exportaciones generaron ingresos por USD 3.530 millones, un 17% más que en 2024, pese a los menores volúmenes. Aun así, el informe advierte que cada punto porcentual que Argentina hubiera logrado redireccionar hacia destinos de mayor valor habría significado entre USD 25 y USD 55 millones adicionales.
Por eso, el avance de las negociaciones comerciales con Estados Unidos y Europa es seguido con especial atención por toda la cadena cárnica, en un momento en el que la dependencia del mercado chino vuelve a quedar en primer plano.
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